Roberto: «He vivido un momento de liberación emocional».
Entrevista exclusiva al goleador Roberto, clave en el ascenso a la Primeira Liga de CD Tondela. (Imagen: CD Tondela).
La historia se escribe a fuerza de héores, como es un ejemplo Roberto (Oporto, 1988). Uno de los mejores atacantes portugueses de su generación, con un gol y una asistencia certificó el ascenso de Tondela a la Primeira Liga.
Tras un comienzo fulgurante, con 9 goles en las primeras 14 jornadas, Roberto no recuperó su impacto hasta la última jornada. Entonces, frente a União de Leiria tuvo 31 minutos que serán eternos para los auriverdes.
De esta forma, logro un título de campeón nacional que se suma al de la Taça da Liga (con Moreirense) que alcanzó en 2017.
Hablamos con Roberto en uno de los momentos culminantes de una carrera en la que los últimos ocho años están acercándose a los 100 goles oficiales. A continuación, les dejo con la entrevista:
Era el día, salió al campo con Tondela perdiendo y se adivinaba en su mirada lo que se venía… ¿cuál fue el sentimiento al terminar el partido?
Estaba muy emocionado, no solo por la victoria que habíamos conseguido, sino también por toda la temporada. Fue un año muy agotador emocionalmente para mí, donde pasé por momentos muy difíciles… ¡Fue un momento de total liberación emocional, donde dejé salir todo lo que sentía!
Es campeón nacional y llega un nuevo ascenso…
Es mi primer título de campeón nacional, pero no mi primer ascenso; ya lo había logrado en la temporada 2012/2013 con FC Arouca. Este ascenso tuvo un sabor muy especial porque también culminó con el título de campeón nacional.
Este ascenso es especial al estar acompañdo de un campeonato nacional».
Como dice fue una temporada dura, quizás a Tondela se le hizo un poco larga, ¿qué momento fue clave para este gran éxito?
Creo que todos los momentos que vivimos juntos fueron importantes, pero si tuviera que definir algunos como clave puedo pensar en varios hechos.
Recuerdo una de las primeras conversaciones que el entrenador tuvo con nosotros, cuando admitió «de puertas para adentro» que quería luchar por el ascenso, aunque no lo creyéramos al 100%, fue impactante…
También en momentos en los que los resultados no llegaban. Tuvimos cuatro empates seguidos y aun así seguíamos creyendo en que todo lo que hacíamos día a día nos llevaría a buen puerto. Tabién en enero, cuando en cinco partidos no conseguimos ni una sola victoria.
¿Cómo le dieron la vuelta?
Nos mantuvimos firmes y confiados. Cabe decir que el barco se tambaleó, pero no se hundió, y se mantuvo firme en su objetivo final.
En los primeros meses lo vimos pletórico y volvió a aparecer en la última jornada…
No fue una época fácil de gestionar, como ya he dicho, fue una temporada emocionalmente agotadora… En la primera mitad de la temporada lo estaba haciendo muy bien a nivel individual, pero tuve un incidente personal (del que prefiero no hablar) que me afectó mucho.
Aunque siempre dije que todo estaba bien, en el fondo, creo que no. A veces me costó mantener el foco. Seguí trabajando bien, pero las cosas no salieron como quería y luego se agravaron. Solo quiero señalar que habría sido imposible superar todos esos malos momentos sin el apoyo de mi familia, el staff y mis compañeros de equipo. Siempre tuvieron una palabra de consuelo y ánimo para evitar que me desanimara… ¡Por suerte, al final todo salió bien!
El mérito es siempre colectivo».
¿Cómo gestiona tener este impacto en la historia de un club tan importante?
Estoy muy contento, aunque sigo pensando que el mérito de todo en este deporte es colectivo: cada uno tiene su papel y si un jugador no está en su mejor momento, se complica.
Ha sido una temporada inolvidable y estoy muy contento de haber podido formar parte de este logro, que ha supuesto mucho trabajo pero una enorme alegría.